sábado, 28 de septiembre de 2019

Notas


A veces me siento en ese abismo tan profundo, ese que me dique y me hace preguntar que hago aquí, cual es la razón de mi existencia, ¿tiene sentido amar?, ¿tiene sentido sufrir?
Cual es el motivo de seguir viviendo, ¿porque da miedo morir y a veces cansa vivir?, tan inútil y pobre es mi capacidad mental, que teme por cosas tan complejas y a la vez tan absurdas, porque es claro que he de morir, y es claro que temo hacerlo, entonces para que pensar en esto.
Porque justo ahora me siento cargando una cruz que es sólo mía, pero que me siento sin ánimo de hacerlo, pero ¿quién soy?, ¿Qué soy?
Soy un espejismo de lo que podría indicar como concepto, la abstracción, memoria y experiencias vividas, pero ¿eso soy?
No lo creo, seré la próxima decisión que tome y eso depende de como se presente el evento, seré ese momento, ese instante, y si, con base a lo que he aprendido, seré ese lapso que no volverá fui el pasado, seré el futuro, y cuando escriba presente… abre sido
Entonces mi existencia es efímera, tan pasajera y tan vacía, ahora entiendo porque la escritura la música, las artes son tan importantes, porque es la forma de dejar nuestro ser en la creación, en el concepto del si mismo y que se recuerde, es la manera de ser y de existir.
¿Qué hago aquí?, nada, absolutamente nada, sólo soy un caminante una estela del cosmos plasmado en una unidad inventada y declarada como tiempo.
Y sin embargo fui ese consejo que di, esa limosna que entregue, ese tiempo en que escuche, ese error que cometí, y ahora soy parte de recuerdos y parte de lo que escribo
Soy este instante que paso y el que pasará, un segundo más de vida un segundo menos para la muerte, aferrado a ser “feliz” y por ver “felices” a quienes amo, pero nada de eso está en mis manos,
Porque tan sólo soy el pasado, y cada instante pasa algo, pero no soy capaz de ver, no hay momentos vacíos, porque una existencia esta presente en cada momento
Entonces es perfecto porque a cada instante esta la oportunidad de definirme, re definirme y ser algo nuevo, de crecer, de crear, de ser, tanta tristeza para encontrar que hay belleza, tanto dolor para amar y soñar, no hay que lamentarse, fui el pasado y ahora seré el futuro lo que decida en aquel instante

domingo, 8 de septiembre de 2019

Orgullo


El orgullo nos ayuda a veces a subsistir de las terribles masacres morales de la humanidad, de aquellos ataques que de ser con armas nos dejarían muertos, o gravemente heridos.

Pero de que sirve ser soberbio cuando alguien tiende la mano, porque negarse a pedir perdón o reconocer una falta, porque no extender la mano a quien nos ofrece una salida, porque no es digno de ese “amor propio” y sobre valoración del concepto del "YO", y es que no podemos rebajarnos a la altura o dependencia de los demás.

He aquí que radica el doble filo de la soberbia, porque entonces se convierte en un estúpido que se niega a aceptar una derrota a cambio de una nueva victoria, de que sirve no aceptar un pan a la mesa si vuestros hijos mueren de hambre, de que sirve no pedir una disculpa y a cambio pasar la noche fría, de que sirve creerse el omnipotente si nadie lo puede solo.

Y el soberbio dirá yo he podido hasta ahora, y es una simple insensatez y bravura inocua, porque alguien ha fabricado su ropa, sus alimentos, los medios y transportes, tonto, jamás podrías solo, porque hasta el conocimiento ha sido construido por alguien más capaz e inteligente que tú mismo.

Se humilde y edificaras tu grandeza, se amoroso y expandirás tu reino, se atento y te llenarás de buen consejo, se agradecido y la esperanza lloverá en tu regazo, más no te rindas, se valiente, se fuerte, se perseverante y no dejes de intentar, pero descansa y acepta solo no podrás y con ayuda lo vas a lograr y te vas a elevar.

EL ORGULLO TE DEJARÁ EN LA PENUMBRA DE LA IGNORANCIA Y EN LA TRISTE SOLEDAD.